La terapia celular avanzada consiste en introducir en el cuerpo, un tipo de célula especial, llamada célula madre mesenquimal, con el fin de utilizar la capacidad de renovación que tienen las células madre para regenerar o restaurar un órgano o tejido que ha sido dañado por desgaste natural como en el envejecimiento, desgaste prematuro como sucede en deportistas de alto rendimiento o someterse a gran intensidad de estrés por ejemplo, o por el inicio y desarrollo de enfermedad.